2 de noviembre de 2008

Consejos para padres. Material para CHICAS.


La Menstruación.
Material para chicas y padres.
Por: Chaile López, Embajador de Fraternidad de Santa Lola en Cuba.

¿Cómo debe hablar con su hija sobre la menstruación, darle información y ofrecerle consejos, su guía y su apoyo antes de que llegue el gran día? O ¿qué debe decirle a su hijo? (Los niños también se hacen preguntas sobre la menstruación). Antes de hablar con sus hijos sobre la menstruación, es importante que usted tenga muy claro en qué consiste exactamente el proceso que desemboca en la menstruación.

¿Qué es la menstruación?

A principios del siglo XX, la menarquia (el término médico que se utiliza para referirse al primer período menstrual) tenía lugar entre los 14 y los 15 años de edad. Por diversas razones, incluyendo una mejor nutrición, actualmente las niñas empiezan a menstruar entre los 9 y los 16 años. Pero la menstruación no consiste sólo en tener el período. Es un indicador de que una chica tiene la capacidad de quedarse embarazada.

Durante el ciclo menstrual, se liberan hormonas desde distintas partes del cuerpo para ayudar a preparar al organismo para el embarazo. Esa preparación se inicia cuando los ovarios (dos órganos con forma ovalada que se encuentran a ambos lados de útero o vagina) producen 2 tipos de hormonas: el estrógeno y la progesterona. Estas hormonas desencadenan determinados cambios en el endometrio (la capa de tejido que recubre el interior del útero). Luego otras hormonas segregadas por la hipófisis estimulan la maduración del ovocito (la célula reproductora femenina) y su liberación desde el ovario. La liberación del ovocito se denomina ovulación, y tiene lugar a medio ciclo –generalmente el día 14 de un ciclo menstrual típico de 28 días. Una vez liberado, el ovocito se desplaza desde el ovario hasta el útero a través de las trompas de Falopio (2 tubitos que conectan el útero con los ovarios).

Un ciclo menstrual entero dura desde el primer día de un período menstrual hasta el primer día del próximo período. El ciclo menstrual típico de una mujer adulta es de 28 días, aunque hay algunos que duran sólo 22 días y otros de hasta 45 días. La fase de sangrado del ciclo menstrual, conocida como período o, coloquialmente como “regla”, suele durar unos cinco días, aunque su duración puede variar. Durante un período una mujer elimina de 2 a 4 cucharadas (de 30 a 59 ml) de fluido menstrual.

Durante los primeros años de menstruación, los ciclos menstruales a menudo son irregulares. Pueden ser más cortos (3 semanas) o más largos (6 semanas), o se pueden tener sólo tres o cuatro períodos al año. La ausencia de menstruación se denomina amenorrea. Una chica debería ir al médico si todavía no ha menstruado con 16 años o tres años después de la aparición de los primeros signos de la pubertad.

Entonces, ¿cómo puede saber usted cuándo podría empezar a menstruar usted o su hija? Probablemente será testigo de algunos cambios corporales que indican que se está acercando la menarquia. El desarrollo de los senos suele ser el primer indicador de que una niña ha entrado en la pubertad. Suele ir seguido del crecimiento del vello pubiano.

Aproximadamente un año después de que se empiecen a desarrollar los senos, la mayoría de las niñas entran en una fase de rápido crecimiento. Aumentan de estatura, su cuerpo se vuelve más curvilíneo y les crecen los pies. Luego, aproximadamente un año después del comienzo del estirón y aproximadamente dos años después de que se inicie el desarrollo mamario, llega la menarquia.

Es fundamental encontrar el momento oportuno

Probablemente es mejor evitar dar a sus hijos “la charla" sobre la menstruación. En lugar de ello, es una buena idea intentar explicárselo en muchas conversaciones breves –enseñar cómo funciona el cuerpo humano debería ser un proceso continuo. Si no, al conceder demasiada importancia a una sola conversación, la información podría resultarles excesiva y agobiante. En otras palabras, cuando un niño se acerca a la pubertad, ya debería saber qué es un pene y una vagina.

NOTA: ¿Qué es importante? Explicarle las partes del cuerpo y lo que es la menstruación, no con charlas ni con presiones, que en ocasiones utilizan los padres.

Con sólo dos años, los niños ya empiezan a hacer preguntas sobre su cuerpo, y sus padres deberían contestarles sinceramente. Pero el grado de especificidad de las respuestas y el nivel de detalles que contengan deberían depender del grado de madurez del niño y de su capacidad de comprensión, particularmente cuando se le está hablando sobre el sexo opuesto.

A lo largo de toda la etapa infantil, los niños tienen muchas oportunidades para formular preguntas, y los padres deberían aprovechar todas esas oportunidades para informarles correctamente. Así, no sólo proporcionarán a sus hijos la información que necesitan tener cuando ellos la pidan, sino que también les demostrarán que están dispuestos a mantener ese tipo de conversaciones y que se sienten cómodos manteniéndolas.

NOTA: Mientras más claro le respondemos, más fácil entenderán del tema y mientras más rápido le explicamos, más tarde se iniciarán en el sexo, porque conocerán de manos segura su cuerpo.

Pero tampoco es necesario que espere a que su hijo le haga alguna pregunta para hablar con él sobre la pubertad y la menstruación. Idealmente, cuando su hijo esté a punto de entrar en la pubertad, ya debería saber perfectamente cuáles serán los cambios que se producirán en su cuerpo. ¿Por qué? Los niños quieren, sinceramente, aprender la mayoría de las cosas de boca de sus padres. Si no se lo explica usted, su hijo lo aprenderá de boca de sus amigos.

Proporcionando a sus hijos una información adecuada, usted podrá saber, por lo menos, que están bien informados, lo que les permitirá reconocer cualquier información errónea o tergiversada que puedan oír en la calle o el colegio. Los niños a menudo dan a ciertos aspectos de la pubertad –sobre todo a la menstruación- una connotación negativa, como si fuera algo malo o a lo que hay que tenerle miedo; y, si ésa es la única información que reciben sus hijos, será lo único que se creerán.

RECOMENDACIÓN: También es importante que los padres den a la menstruación una connotación positiva. Si una madre se refiere a la menstruación como "la maldición" o “la lata”, su hija podría hacerse una idea negativa de la experiencia. En lugar de ello, las madres pueden explicar a sus hijas que la menstruación es algo natural y una parte maravillosa de ser mujer. Después de todo, si no tuviera la menstruación, una mujer no podría ser madre.

Hacer hincapié en que todo el mundo es diferente también es fundamental. Por ejemplo, si su hija está preocupada porque su cuerpo está cambiando más deprisa o más despacio que el de sus amigas, quítele hierro al asunto diciéndole que cada persona madura a su propio ritmo.

Otro motivo de que los niños tengan que estar informados sobre la menstruación desde bastante pronto es que las niñas que mantengan relaciones sexuales se pueden quedar embarazadas antes de empezar a menstruar. A veces, la ovulación (la liberación de un ovocito desde el ovario) puede ocurrir justo antes de que la niña tenga su primer período. Esto significa que puede ser fértil y quedarse embarazada incluso aunque todavía no haya menstruado ninguna vez. Por supuesto, a ningún padre le gusta plantearse que su hija de 13 años pueda estar manteniendo relaciones sexuales, pero quedarse embarazada durante la primera adolescencia es mucho peor.

Tanto las chicas como los chicos suelen tener preguntas que hacer sobre la menstruación, como por ejemplo:

¿Por qué sólo las mujeres tienen el período? Hay que explicarles que los chicos cambian de formas distintas durante la pubertad; por ejemplo, se les hace más grave la voz y les crece la barba. Cuando una chica empieza a menstruar significa que tiene la capacidad de tener hijos.

Cuando a una chica le viene la menstruación, ¿significa que seguirá teniendo el período durante el resto de su vida? No, una mujer deja de menstruar entre los 45 y 50 años de edad, lo que significa que ya no podrá quedarse embarazada (por lo menos, ¡sin el último grito en técnicas de reproducción asistida!).

¿Qué es mejor usar compresas o tampones? A la hora de elegir entre estas dos opciones, lo más importante es lo cómoda que se sienta la chica con la elección, tanto desde el punto de vista físico como psicológico. Un tampón puede resultar incómodo durante los primeros años de menstruación, cuando la pelvis y la vagina todavía están en proceso de crecimiento.

Normalmente las chicas se sienten más cómodas utilizando primero compresas, pero muchas de ellas empiezan a querer utilizar tampones cuando se hacen un poco mayores (aunque no hace falta esperar a ninguna edad para poder usar tampones).

Aunque las primeras veces que una chica intenta ponerse un tampón pueden ser frustrantes, explíquele a su hija que, con un poco de práctica, pronto le cogerá el tranquillo al proceso. Debido a que los músculos de la vagina pueden tensarse cuando una chica está nerviosa, la inserción de un tampón puede ser difícil al principio. Es importante estar lo más relajada posible. También puede ayudar empezar con tampones finos provistos de aplicador que resultan más fáciles de insertar.

¿Tienen las chicas que dejar de hacer deporte o natación mientras tienen el período? Las chicas deben saber que, cuando tienen el período, pueden hacer todo lo que hacen habitualmente, siempre y cuando se sientan cómodas. Por ejemplo, las chicas que practican habitualmente la natación tal vez prefieran ponerse un tampón para poder continuar practicando este deporte durante la menstruación.

Elaborado en la Embajada de Fraternidad de la Fundación Santa Lola, en Cuba.

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